viernes, 31 de julio de 2009

"Six Feet Under" Temporada 3: La Falsa Estabilidad

No entiendo muy bien las malas lenguas que decían y aseguraban que la tercera temporada de "Six Feet Under" ("A dos metros bajo tierra") bajaba la calidad de las dos anteriores, eso si, era difícil seguir la estela de la que para mí es la mejor de todas hasta ahora, la segunda. Puesto el punto y final a la tercera guinda de la serie creada por Alan Ball, tengo que decir que sí, es tan imprescindible como las demás, y también, que la serie sigue siendo emblemática y maravillosa en todos los sentidos. Tema principal de esta temporada, quizás más lineal para todos los personajes (Es por ello que también se critique y se diga que es más floja como temporada) es, el tema del falso equilibrio. Ese primer y magnífico (aunque extraño) episodio con el que se nos pone en expectación tremendista al espectador (genial el juego de la muerte-vida de uno de los personajes principales) para adentrarnos luego en unos episodios asentados, digo lo de asentados, porque todos los personajes siguen evolucionando en una edulcorada "realidad-equilibrada" que ellos mismos hacen ver, pero que en realidad oculta bastante, y no estalla del todo hasta el espectacular final de temporada (drama puro y duro, brutal, seco, distante, el final de temporada más tristes de la serie en mi opinión). El personaje de Nathe (Peter Krause vuelve a ser maravilloso, que maduración de su personaje, que final, impresionante su interpretación) expone quizás la base de la que toma riendas todos los personajes de la serie hacia esa supuesta "mascara" social de falsa estabilidad, Nathe se encuentra nuevamente atado a las normas, y paga el pato al final, ojo con su trama, realmente lo mejor de la temporada. En segunda posición Claire, que ve en la escuela de arte todos los problemas de la hipocresía mundial, en ella está el espíritu de la ingenuidad, pero también encontrando ese afán luchador por considerar la moral, Lauren Ambrose le da vida a Claire, volviéndola más interesante si cabe, un personaje que cada vez me gusta más y más, genial (por cierto el profesor de la escuela es toda una revelación dentro de lo que la serie critica también: El patetismo humano, genial, al igual que otro personaje nuevo de esta temporada, Russell, intepretado por Ben Foster, buen rol),. Ruth sigue siendo un personaje espiritual, pero esta vez conoce nuevas fronteras en el amor, sobretodo hacia el final de la temporada, la inclusión del fantástico actor Rainn Wilson (el inolvidable Dwight en la serie "The Office") da un juego bastante interesante.

Quizás lo único reprochable sea que el personaje de Brenda, siempre extraordinaria la actriz Rachel Griffiths, no aparezca hasta mediada la temporada, y ciertamente se nota, eso si, sus apariciones y el juego que da en el spint final, es para quitarse el sombrero. En resumidas cuentas una temporada fría que te revuelve las entrañas en más de un episodio (a mi me afectaron varios especialmente, no sabría explicarlo), introspectiva, tratando ese tema que quizás sea el que lleve la raza humana más pegado en la frente: la rutina y el equilibrio creado ante la evidencia de una decadencia sentimental y personal, esto se ve también en la complicada relación entre Keith y David, donde nuevamente Michael C. Hall deja claro que es fabuloso, su final de temporada, al igual que el del personaje de Rico (Freddy Rodríguez) es tremendo, no hay palabras. "Six Feet Under" abre un abanico muy frío para la cuarta temporada (aunque igualmente interesante) simplemente porque los personajes parecen más perdidos que nunca, más desesperados por encontrar ese equilibrio que aquí se expone pero esta vez de manera verdadera, pues no les será fácil creo pensar. La capacidad de sorpresa y mi admiración para esta serie se vuelven a hacer realidad, creo que eso es lo importante. Una tercera temporada que NO tiene altibajos, simplemente se desvía hacia caminos nuevos, igualmente interesantes, caminos que hay que pasar para comprender un poquito más la vida humana. No tiene desperdicio, hasta puede que inconscientemente (aunque siga predicando que la segunda temporada fue la más redonda) esta temporada sea la que más me ha afectado anímica y personalmente. Seguiremos ahora con la cuarta, veremos, por lo que m han dicho, ahora le toca el turno al tema sexual...je.